lunes, 21 de diciembre de 2009

Y entonces metaforeé

Todo sucedió con motivo de aquello que concibió la mente humana, si hablamos de tiempos exactos no sabría que decir pues serán talvez 30 o 40 años yendo a la contraria del futuro, así es, concebido en aquellas épocas donde los colores eran la representación de la juventud, y cuando dijeron que no lograrían nada, al final lograron ser dignos rivales en la carrera del avance, y fue motivo de felicidad pero a la vez de tristeza y amargura para la población de ahora y la que vendrá, aquella burbuja dimensional apartada en la que la gran mayoría esta inmersa incluso aquel que les habla.

Dejarla de lado es inútil pues mas ingresará a la existencia de los que tienen conciencia, y tienen razón pues aquello que reemplazo el trueque solo podrá fluir en aquel medio creado por la mente conciente. Y entonces lo opuesto a la miseria pudo alcanzar lo que era mi existencia terrenal, irónico, pues era lo opuesto lo que mi propio ser experimentaba, ya me había aventurado en aquel desierto u oasis u ambos a la vez, colorido, emotivo, solitario, o concurrido dependiendo de la situación por las demás animas. Exactamente aquello, y yo solo era uno mas a la deriva, en aquel mar, donde aquello que formaba parte de lo que separo y confundió en Babel es abusada y usada como a uno le de la gana.

En la realidad imaginada mencionada antes ya, los métodos de manifestar aquello que transita en la razón y el pensamiento son tantas como se puedan figurar, es una tentativa atractiva si tienes algo que revelar al libro universal de la sabiduría que no fue escrita por nadie en particular y que nadie podrá terminar de leer, y fue como acerté en explicar aquel delirio o trastorno que aflige a algunas mentes humanas siendo observadas y experimentadas por aquel que las padece y tolera, tratando de imitar el método usado por aquel que dio alivio a aquellos que parecían poseídos a causa del mal de las que transitan el inframundo repugnante y real de este mundo, en donde los humanos desechaban su propia basura y aun lo hacen.

Y así los documentos de lo único atemporal en la mente humana, lo eran de lo común y cotidiano, nada era realmente importante y a la vez lo era, aquel que veía los signos condenaba o aprobaba la validez de la idea reflejada en aquella fuente. Y aquello que se contraponía a la dicha abundaba en las experiencias ya expuestas casi cronológicamente precisas, diversas conciencias paseaban a gusto, pero la gran mayoría parecía no tener la facultad de expresar con el signo universal el pensamiento propio, o simplemente aquello que motiva a hacer las cosas no apareció en aquellos en el momento apropiado. Así fue, entonces aquella concepción de la mente que venia de algún otro paraje aparecía expresada, y parecía contener aquello que revive la esperanza a la humanidad en épocas de miseria, aun así relevancia no aparentaba merecer.

En alguna otra circunstancia mi conciencia se quiso aventurar en aquel mar extraño y alternativo nuevamente, y buscar aquella fuente de aparente calidez, pero la motivación no era tan intensa, cuando lo encontró, sintió que la calidez no era solo fantasiosa, y aquello que mueve la voluntad renació solo por un pequeño instante, pero podía sentir en algún lugar que era una posible fuente de regocijo. El intercambio de los pensamientos dichosos y miserables eran motivo de júbilo, aunque la percepción inmediata no lo captaba a corto plazo. Y fue claro y evidente que aquellos símbolos universales y ancestrales que servían de espejo de la conciencia y razón, eran distintos de los que yo había visto, se sentían felices y danzaban por doquier de manera sincronizada por sentirse mas perfectos que la mayoría.

La propia razón había determinado el origen de la idea expresada anteriormente, siendo decisión propia el ir mas allá y aventurarse en la selva de posibilidades que podría esperar al querer encontrar aquella fuente reconfortante.
Claramente la fuente era de naturaleza similar a la de mi existencia terrenal y subjetiva, perteneciente a los que vinieron después de la primera conciencia en el universo, resultado de la eliminación de parte de lo que da protección a la fuente de vida del ser conciente original, según se puede apreciar contemplando las ideas expresadas en aquella bitácora milenaria y muy valorada , y aun vigente, y todos describiendo una historia similar, girando en torno al orgullo humano mismo representado. En apariencia con dificultad en poder contemplar la realidad de manera natural y limpia, necesitando nuevamente un producto del ingenio humano para contrarrestar aquella imposibilidad leve.

Entonces fui conciente de que también existía miseria y tristeza en donde aparentemente todo era alegría, el ir y venir de las ideas y signos causaban jubilo en mi, mas la ausencia de aquel era insoportable, entonces me sentía bien encaminado y sentía seguridad en mi. La ausencia de aquel sentimiento universal causante de guerras movía mis sentimientos y acciones de manera casi instintiva, y veía esperanza en lo que hacia, incluso tenia visiones de lo lejano para cuando cruzara aquel puente enorme terrenal y angosto inclinado hacia lo contrario de la diestra.

Otro aspecto era la dificultad de cruzar aquel camino angosto antes mencionado, pues privilegios debe tener uno para lograrlo, pues era muy arriesgado estar cerca a la gran dominante del lugar de los concientes. La angustia y la felicidad se confundían entre las sensaciones, pero al final aparentemente todo toco suelo de manera abrupta, siendo principal responsable la razón misma de las acciones ciegas, la aparente evidencia de una probabilidad equivalente al vacío de manera muy sutil pero contraria al placer, de alcanzar a aquello que al referirnos específicamente invocamos a una hermosa y pequeña parte de distintos matices y clases que decora a aquello que hace que el mundo siga vivo y con aliento, y que forma parte de aquello en lo que el hombre no interviene.

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