viernes, 25 de marzo de 2011

Qué días tan extraños he pasado…

Escribo, incluso ahora que no tengo ganas de escribir, no tengo ganas de nada, ni de dibujar, ni pintar.
El Lunes pasado salí con Diana, la semana pasada acordé con ella encontrarnos, ella me habló destrozada por el msn luego de que fallara en el exámen de ingreso de Bellas artes, estaba bastante triste y molesta. Aquel día llamó a mi casa y sólo me dijo que me conectara. La ví conectada y le hablé, me dijo cosas cómo “No soy una artista y jamás lo seré” “Mi vida no tiene futuro”, me molestaba que estuviera irritable cuando yo la intentaba consolar, pero no le decía nada. Dejé que se desahogara y dijera todo lo que tenía guardado, incluso me comentó que consideraba la prostitución cómo una forma de ganar dinero, ya que según ella me contaba, odiaba depender de sus padres, cuando me dijo aquello pensé que debía ser la desesperación.
Me incomoda hablar con Diana, antes no lo notaba pero las actitudes que ella toma son un tanto cagonas, dice cosas hirientes, se da ciertos aires de superioridad y se escandaliza rápido. Una vez me pelee con ella cuando se había encaprichado en decirme que dejara de rogar por el msn a Lorena, ¡Cuando en verdad a Lorena no le había hablado durante meses!
Es una buena chica, es solo que es bastante complicada.
Al final de nuestra conversación se puso menos irritaba, le había hecho ver la posibilidad de irse conmigo a Ica, aunque ella anteriormente me había dicho que sí, ahora no se mostraba segura, me decía que era muy difícil, que era mucho dinero y su papá no le apoyaría en nada. ¡Pero es para tus estudios!- le decía, aún así se mostraba un tanto distante a aquella opción.

Nos encontramos a eso de las 3:00 pm en el Parque de la exposición, para llegar fui yo hasta la Arequipa y de ahí tome un carro directo al parque. Me fui hasta la entrada que estaba cerca al museo y esperé en una de las bancas, me senté escuché música un rato y no tardó en llegar Diana. Me contó todas sus peripecias en la escuela, que fue a reclamar al coordinador, y hasta habló con el mismo director (Según ella era bastante chibolo), para ver si podrían darle una bacante, ya que ella no pasó la prueba sólo por pocos puntos. Me contó que incluso unas chicas estaban llorando y ella era la que reclamaba con más énfasis; yo comentaba cada tanto.

Terminamos de hablar, nos levantamos y nos fuimos a caminar dentro del parque, había en la zona dónde esta la pileta central una feria, en la cual vendían artesanía peruana, bordeamos aquella área y nos sentamos en otras bancas. Le empecé a animar sobre lo de Ica, le hablaba y le contaba cómo sería si viviésemos allí, que las cosas serían sencillas y ella se mostraba cada vez más animosa, cómo teniendo también deseos de ir, aquello me tranquilizaba cada vez más. Un vendedor de canchita y maní se nos acercó, insistiendo de manera molesta a que le comprásemos, pero nos negamos. Por lo que se alejó refunfuñando.

Caminamos de regreso a la entrada, salimos del parque. Cruzamos la avenida y fuimos a un parque aledaño el cual se llama, si no me equivoco “Parque de los museos”, avanzamos y nos sentamos en una especie de gradas, en las cuales también había en un lado una pareja de enamorados, y en otro un grupo de extranjeros. Conversamos bastante también, teníamos vista a una bonita pileta con una escultura de Neptuno en lo más alto, bordeándolo en forma circular, en la parte inferior habían varias esculturas de peces. Notamos que otro vendedor inoportuno molestaba a la pareja que había a nuestro costado así que preferimos levantarnos. Caminamos por un sendero que nos llevaba a una avenida, pero no la cruzamos ya que por aquella zona era peligroso, según ella. Ella sabe del problema que padezco, en cierto momento llegamos a un lugar donde había bastante gente, cosa que me hacía sentir mal, así que ella me dijo para bordear el lugar e irnos por otro, cosa que me hizo sentir mejor.
Regresamos al parque de la exposición, bordeamos la feria y nos sentamos sobre el césped debajo de un arbol, conversamos mucho, de cosas sobre Ica, de trios sexuales, homofobia, etc, cuando comentamos nuestras preferencias sobre la belleza, nombrábamos actores y actrices conocidas, y cada uno decía si le gustaba o no. Cuando le dije sobre Johnny Depp me dijo que le gustaba, -¿Por qué a todo el mundo le gusta Johnny Depp?-bromeé. –¡Por su personalidad pues!- reía Diana mientras me contestaba. Hablábamos y bromeábamos sobre las parejas de novios que había alrededor nuestro y que cada que volteábamos siempre había una pareja abrazandose o besándose. Me incomodaba mucho eso, sentía tanta…envidia, que se me hacía molesto. Ella me contó que terminó con Florian, y se despidió de él. Aunque no perdió contacto con este. Yo le conté lo que me había sucedido a mí. Ella sabía como era la relación que yo tenía, aunque no del todo exactamente.

Se hizo oscuro y seguimos hablando de webadas…jaja, eran webadas en verdad. Le conté que una vez con una enamorada fuimos a un parque y nos acostamos en el césped y luego cuando nos levantamos tenía yo todo el polo manchado de verde atrás, ella reía cuando le contaba esto, porque también le había pasado. Empezaron a cantar en la feria, canciones conocidas cómo “Killing me soflty with his song”, “Gimme, gimme, gimme” entre otras. Frecuenteme bromeábamos sobre los novios que había a nuestro alrededor, yo le decía que me dolían aquellas escenas y no me mostraba reacio a ellas por otra cosa. En cierto momento ella me dijo que tenía algo de frío pues no había venido muy abrigada. No recuerdo en qué momento exactamente me dieron ganas de decirle -Oye abrázame, me muero de frío- en modo de broma, lo que le llegué a decir fue –Te voy a abrazar Diana, si tanto frío tienes-, me contestó dijo “No, no, no” entre risas, y se hizo un silencio entre ambos, luego ella me dijo “Bueno, abrázame si quieres” y volvió el silencio de nuevo, empezamos a comentar cosas del todo equis, durante un rato. Me sorprendí cuando…ella se acerco de pronto y apoyo su cabeza en mi hombro, yo hice lo mismo y apoye mi cabeza sobre la suya, estuvimos así buen rato, y cuando la trataba de mirar ella no correspondía y volteaba la mirada, le decía cosas cómo –Oye nos van a confundir y dirán que somos del montón de novios que hay aquí- Ella ya no reía y sólo asentía con la cabeza. Me pareció extraño verla así…siempre se mostraba tan fuerte, tan efusiva...no sé, y ahora la contemplaba bien débil. Nos quedamos así buen rato, sin decir mucho. Le dije cómo en broma, que no se preocupara que era nuestra bohemia artista, se lo dije riéndo. Luego regresamos hasta la entrada, caminábamos un tanto arrochados, y después no sucedió nada interesante. Aunque regresé a casa un tanto extraño, incómodo en cierto modo. No es la primera vez que Diana muestra interés por mí, siempre me manda mensajes, pregunta cómo estoy, cuando no iba al taller Cora me contaba que se ponía triste y que decía cosas cómo- ¡Juan Manuel ya no viene!, Cora, ¿Será que dejó el taller?- Cora me contaba que lo decía de cierta manera desesperada. Trate de ver mejor las cosas y pensar mejor que ella no siente nada por mí.

Al día siguiente a eso de las 5:00 pm me manda un mensaje Maria Paula, diciéndome que ibamos a celebrar el ingreso de Andres y que nos encontraríamos en la plaza de Barranco a eso de las 7:00pm, me bañé y me aliste y salí a eso de las 6:00, pero el carro se demoró un webo hasta allá, se fue hasta por Larcomar y me dejo bien lejos de la plaza. No me quedó de otra, caminé hasta la plaza por lugares un poco inseguros, por momentos me daba miedo pasar por esas zonas, pues sé que en la noche Barranco se pone un poco peligroso. En el mini-anfiteatro de la plaza los divisé a lo lejos, María Paula me hacía señas para encontrarla. Andres se había rapado completamente jaja, María Paula decía que era un Skinhead. El nos invitó a comer algo antes de empezar a tomar y nos llevó a un restaurante, nos compró a cada uno una salchipapa. Era un local normalón, típico restaurante de barrio. Una señora nos atendió. Hablamos de las típicas cosas que hablamos nosotros. Al principio hablamos sobre política, sobre los candidatos de nuestras preferencias, yo dije que botaría nulo, igual María Paula, y Andres no votaría por estar tan lejos de Chiclayo. Luego sobre la teoría de las cuerdas, universos paralelos, sobre el examen de Admisión. Me siento cómodo con ellos, de cierta manera…pues aunque diga cualquier huevada por más insignificante que sea ellos me escuchan. María Paula en cierto momento se fue al baño, y al regresar comentó que el baño le parecía un lugar pesado, que sentía que la observaban. Hablábamos y bromeabamos hasta que nos levantamos y volvimos a la plaza. En el camino nos fumamos unos cuantos cigarrillos, todos invitados por Andres. Al volver a la plaza Andres decidió llamar a una amiga suya, cosa que al principio me incomodó un poco, lo cual se los comenté, pero luego se me pasó. Nos sentamos a esperar en unas gradas fuera de la iglesia hasta que llego Selene, una chica a la que Andres sólo había visto un par de veces, y que conocio en una reunión de sus amigos. La saludé de manera aparentemente apática, creo, ella me lo dijo rato después. Era una chica sencilla, llenita, de cabellos largos, vestía unos jeans y una blusa color verde. Después de los correspondientes saludos, entre bromas (Andres le llamaba a ella “emo de corazón”), nos llevo a un bar que conocía llamado “Mancora”. Era un sitio medianamente iluminado, con música a alto volumen de variados estilos. Nos sentamos en instantáneamente nos pusimos a charlar.

Ella contaba que nosotros la habçiamos “salvado” de una de sus crisis de “emura” ya que justamente se había enterado que un chico, el cual era su mejor amigo y el cual pensaba que gustaba de ella, había empezado una relación con una chica y jamás le dio aviso a ella. Le amargaba el hecho de que no se lo hubiese contado, teniendo tanta confianza. Según si no la llamábamos fácil se quedaba en su casa llorando o renegando. Andres, María Paula y yo le charlábamos, y le tratábamos de animar. Yo le pregunte si se sentía mejor, lo cual ella respondió que bastante mejor. Nos contó también que estudiaba diseñografico en la Tolouse Lautrec, cuando mencionó la Tolouse inmediatamente se me vino a la mente mi ex compañera de Ipad, Fiorella, iba a preguntarle sobre ella, si la conocía o tenía una referencia, pero se me pasó. Yo en tono de broma le pregunté si le gustaba las pinturas de Tolouse Lautrec.
Era una chica bien buena onda, me causaba bastante confianza y llegamos a entendernos bastante bien, tanto que a veces nos perdíamos en una conversa los dos y dejábamos a Andrés y María Paula de lado, cuando aquello sucedía ellos decían -¡Hay que hacer una pared! Ellos están en su onda. Pared, Pared!- decían. Nosotros nos vacilábamos. Esa noche bebí en exceso y fumé en exceso. Me sentaba bien una noche así, pensaba yo. Después de tanta mierda creo que al menos me lo merezco. Me sentía bien, dentro de todo. En cierto momento ya creía que me iba a desmayar jajaja. Y cuando intenté pararme, Selene me ayudó a caminar hasta el baño, fue una escena bastante graciosa de recordar. De hecho que necesitaba ayuda, pero cómo que…me daba roche y mejor le decía –Oye, normal, normal, sí puedo caminar- y ya me soltaba. Pasamos buen rato charlando y riendo. Luego nos fuimos del bar y caminamos hacia el mar, fuimos hasta la parte del malecón, desde dónde observamos el mar, María Paula estaba con Andres, yo con Selene. Estuvimos buen rato observando…nadie dijo nada, me gustaba el silencio que en ese momento colmaba nuestros momentos. Era cómo un intervalo calmo y necesario. Al cabo de un rato volvimos a subir, cosa que no agradó mucho a María Paula, y volvimos de nuevo al mismo bar. Andrés me dio diez soles y me dijo que comprara otra botella de cerveza, María Paula y él se fueron al baño, yo y Selene quedamos solos, no recuerdo de qué charlamos, me gustaba que siempre respondiera a lo que decía con una sonrisa en el rostro. Al parecer a ella le agradaba que cada que hablase yo le escuchara y mirara a los ojos. Me puse a dibujar cómo en broma en la mesa en la cual estábamos sentados, cuando volvió Andrés lo dibujé, todos rieron al ver el improvisado retrato que hice de el. Lo dibujé con la botella de cerveza en la mano. También dibuje un vaso con cerveza. María Paula pidió al chico que atendía que cambiara la música pero dijo que el Dj no estaba. Era un día de semana y de todas maneras no había mucha gente en Barranco. Selene en un momento preguntó -¿Cómo saben que alguien es gusta?- Andres dijo que es cuando uno empieza a ponerse nervioso al estar con la persona, al ponerse triste por su ausencia. Yo dije que el amor cómot al empieza por el deseo sexual a esa persona, cosa que en cierto modo compartieron conmigo, al final somos animales, pero también, dije, se manifiesta cómo una necesidad exagerada de la presencia de la persona en nuestras vidas. Selene decía que es cuando ella empezaba a sentir celos de esa persona. Cuando me empecé a poner más hablado Selene me dijo que le sorprendía ahora verme de ese modo, que le parecía lindo, en cierto modo, que los hombres se emborrachen, pues es un cambio de roles, es verlos más…indefensos en cierto modo, y ahora eran ellas quienes nos cuidaban. Yo en broma le dije- Entonces cuídame, Selene-, -Te voy a cuidar Juan Manuel jaja- contestó riendo.
Me sorprendió que me dijera que al principio le parecí un chico algo sobrado pero después de unas copas había cambiado por completo. Decía que todo el mundo tiene un lado oculto, ya veces ese lado es mejor.

El cierto momento nuestro conversación dio un giro, y empezaron a hablar sobre la muerte y la posterior resignación a ella. En esos momentos apenas y estaba consciente jaja, recuerdo todo cómo si estuviera borroso en mi mente, recuerdo que en la charla Selene contaba que en su misma habitación estaba su abuela conectada a un aparato que la manteía con vida, que era muy triste verla en ese estado y que no podía concebir el hecho de que algún día muriese, Andres le decía que no, que debía ya hacerse la idea. La madre de Andres ya murió, y el contaba que también fue un choque muy grande en su vida pero que lo superó, pero Selene decía que no, y que si su abuela moría, ella también tendría ganas de morirse. Selene se empezó a incomodar, Andres también estaba algo ebrio, y hablaba extraño, le decía que no podía vivir de ese modo, siempre deprimiendose; en cierto momento Selene dijo –Bueno, ya. No hablemos más de esto por favor- y simplemente cambiamos el tono de la conversa. No mucho después nos levantamos y dejamos a Selene en su casa, fuimos hasta un residencial. No recuerdo muy bien, ahora que trato de rememorar, el camino a su casa. Estaba bastante mareado y apenas me sostenía en pie, al final el más cagado resulté yo, pues tomé desmedidamente, pero eso sí…por voluntad propia. Tenía mucho que desfogar.

Luego de dejarla en su residencial y despedirnos, salimos, dimos unos cuantos pasos, Andrés se puso a orinar en la calle jajaja, mientras María Paula miraba “horrorizada”, me ofreció hacer lo mismo pero cuando quise simplemente no pude, no tenía costumbre de hacerlo en la calle. Un poco más caminamos y Andrés empezó a vomitar. Luego de todo eso, ya nos fuimos hasta una calle y tomamos un taxi, todos nos fuimos a casa de María Paula. Al subir al taxi simplemente acosté mi cabeza en el hombro de mi amiga y me quede seco, profundamente dormido, hasta cuando llegamos a casa de ella. Oriné afuera de su jato, ya que era una zona donde había bastante tierra. Andres vomitó otro par de veces afuera de su casa también. Luego entramos y nos dijo que nos acostáramos en un sillón cada uno. Nos dio un poco de agua, estuve un rato pensando, acostado, y luego me quede jatazo hasta el otro día. Está demás decir que tuve una resaca de la puta madre al día siguiente.

Al otro día tomamos desayuno. Conocí a la hermana de María Paula. Andres se dio una ducha y yo me lave la cara. María Paula nos acompañó hasta el paradero y tomé un bus que me llevaba hasta cerca de un centro comercial que no estaba lejos de mi casa. Al llegar a mi casa me recibieron bien, ya que había enviado un mensaje a mi mamá el día anterior, cosa que no me hicieron problema.

Me tiré a la cama. Dormí prácticamente todo el día.